jueves, 28 de agosto de 2025

VACUNA QUE CAUSA CÁNCER O NO: CASO MÉXICO

 


 

Por Carlos Valdés Martín

 

Persiste el rumor en las redes sociales que las vacunas del Covid provocaron una epidemia de cáncer. Basta mirar las estadísticas normales y en directo, para darse cuenta de si esa afirmación tiene un mínimo de verdad. Durante 2020 y 2021 sucedió la vacunación masiva en el país intentando apagar el fuego de Covid-19. La epidemia se controló de manera drástica y la terrible epidemia dejó de provocar la oleada de sus muertes. Los aguerridos antivacunas no quedaron contentos que las vacunas fueran eficaces para el Covid-19 y han popularizado un argumento antivacunas, para reconocer su derrota. Junto con el pánico irracional de las tendencias antivacunas, ha mantenido la leyenda urbana de que las vacunas fueron hechas para despoblar al mundo provocando una oleada de cáncer mortal. Veamos si existe una mínima verdad sobre el tema de cáncer.

Siendo las estadísticas más confiables las de reportes de muerte, podemos observar en México que la mortalidad por cáncer sigue una tendencia de aumento desde antes de las famosas vacunas, sin que exista algún “pico” de crecimiento espectacular que se relacione con el Covid.

Veamos un resumen y cuadros desde Grok: Los datos anuales se obtienen de las Estadísticas de Defunciones Registradas (EDR) del INEGI, que compilan información de certificados de defunción. A continuación, se presenta un resumen de las defunciones absolutas y las tasas de mortalidad (defunciones por cada 100,000 habitantes) para el período 2014-2023. Nota: Las cifras absolutas para años anteriores a 2021 son estimaciones basadas en tasas y población reportada por INEGI y fuentes complementarias como el Global Burden of Disease (GBD); las de 2021-2023 son cifras oficiales preliminares o finales. La población de México creció de aproximadamente 119.5 millones en 2014 a 129.2 millones en 2023 (aproximadamente 8.1%), lo que influye en las cifras absolutas.

Año

Defunciones por tumores malignos

Tasa de mortalidad (por 100,000 hab.)

Notas clave

2014

   77,000

63.7

Tendencia inicial al alza; cáncer de mama y próstata como principales en mujeres y hombres, respectivamente.

2015

   78,500

65.0

Aumento leve; ~83,000 estimado en fuentes previas del INEGI.

2016

   80,500

66.8

Incremento sostenido; factores de riesgo como obesidad comienzan a impactar más.

2017

   82,000

67.4

Cerca de 90,000 según estimaciones generales de la Secretaría de Salud.

2018

   83,500

68.1

Aumento en diagnósticos tardíos (60% de casos en etapas avanzadas).

2019

   86,000

69.7

Pre-pandemia; Son 195,000 casos nuevos diagnosticados anualmente.

2020

   90,000

71.7

Pico de la década; posible subregistro por saturación del servicio médico durante pandemia de COVID-19, pero tasa máxima.

2021

   90,123

70.6

El 8% del total de defunciones; 63% ocurrieron en el hogar.

2022

   90,018

69.6

Ligera disminución en tasa; 7,840 muertes por cáncer de mama en mujeres ≥20 años.

2023

   91,562

70.8

Son 52.4% en mujeres, 47.6% en hombres; tasa más alta en Chihuahua (86.3).

Tendencias y análisis

  • Tendencia general: La tasa de mortalidad aumentó de 63.7 en 2014 a 70.8 en 2023. Esto representa un incremento aproximado del 11% en la tasa ajustada por edad y un crecimiento anual promedio del 1.2%, aunque hubo una ligera estabilización en 2021-2022. Si descontamos el efecto de más población, crecimiento real promedio del cáncer mortal en esos 9 años es de 0.32% anual.   Las defunciones absolutas subieron de 77,000 a 91,562, en parte por el crecimiento poblacional y el envejecimiento (la tasa es más alta en ≥80 años: 755.8 por 100,000 en 2023).
  • Por género: En 2023, las mujeres representaron el 52.4% de las muertes (47,976), impulsadas por cáncer de mama (principal causa en mujeres ≥30 años) y cervicouterino. Los hombres tuvieron tasas más altas en la mayoría de los grupos etarios (excepto 30-59 años), con próstata como la principal causa en ≥60 años.
  • Por tipo de cáncer: Los más letales en 2023 fueron de órganos digestivos (32.7%), genitourinarios (24.7%) y mama/piel (13.7%). En jóvenes (0-29 años), la leucemia domina.
  • Por entidad federativa: Las tasas más altas en 2023 se observaron en el norte (Chihuahua: 86.3, Baja California Sur: 86.2, Sonora: 83.2), posiblemente por mejores registros o factores ambientales. Las más bajas en el sur (Guerrero: 51.1, Tlaxcala: 62.2, Oaxaca: 62.9), atribuible a subregistro.
  • Factores contribuyentes: Según la OMS y GBD, 30-50% de los casos son prevenibles mediante hábitos saludables, vacunación (ej. VPH para cervicouterino) y detección temprana. En México, el 60% de los diagnósticos ocurren en etapas avanzadas, lo que eleva la mortalidad. La pandemia de COVID-19 pudo afectar el acceso a tratamientos en 2020-2021.

 

Incidencia de cáncer en México en la última década (2014-2023)

La incidencia de cáncer (número de casos nuevos diagnosticados, clasificados como "tumores malignos" en las estadísticas oficiales) en México ha mostrado una tendencia al alza en la última década, impulsada por el envejecimiento de la población, el aumento de factores de riesgo como la obesidad, el tabaquismo y la exposición ambiental, así como mejoras en los sistemas de registro que permiten una mejor detección. Según estimaciones de la Secretaría de Salud (SSA), el Instituto Nacional de Cancerología (INCan) y el Global Burden of Disease (GBD) del IHME, se diagnostican alrededor de 195,000 a 220,000 casos nuevos al año en promedio. En 2023, se estiman aproximadamente 220,000 casos nuevos, con una tasa de incidencia ajustada por edad de alrededor de 140 por 100,000 habitantes. A diferencia de la mortalidad, la incidencia no siempre se registra con precisión debido a subdiagnósticos en etapas tempranas (alrededor del 40% de los casos se detectan tarde) y limitaciones en los registros poblacionales como el Registro Histopatológico de Neoplasias Malignas (RHNM).Los datos se basan en estimaciones del GBD 2019 (actualizadas al 2021), boletines de la SSA y proyecciones del INCan, ya que INEGI se centra más en mortalidad y no publica cifras anuales detalladas de incidencia. Las cifras absolutas son aproximadas para años previos a 2020 debido a variaciones en los métodos de estimación; para 2020-2023, incorporan ajustes por la pandemia de COVID-19, que redujo las detecciones en un 20-30% en 2020-2021. La población de México creció de 119.5 millones en 2014 a 129.2 millones en 2023, influyendo en los números absolutos. Nota: Datos para 2024 no están disponibles aún al 28 de agosto de 2025, pero se esperan actualizaciones en informes anuales de la SSA.

Año

Casos nuevos estimados por tumores malignos

Tasa de incidencia (por 100,000 hab., ajustada por edad)

Notas clave

2014

~160,000

~130

Estimación inicial basada en GBD; cáncer de mama y próstata como los más incidentes en mujeres y hombres. Subregistro estimado en 20-30%.

2015

~165,000

~132

Aumento leve; foco en cáncer cervicouterino en mujeres del sur del país.

2016

~170,000

~135

Incremento por mejor vigilancia; ~50,000 casos en mama y colon combinados.

2017

~175,000

~137

Proyecciones SSA indican ~180,000; énfasis en prevención con vacunación VPH.

2018

~180,000

~138

Aumento en diagnósticos; cáncer de tiroides y pulmón en ascenso por factores ambientales.

2019

~195,000

~140

Pre-pandemia; datos GBD confirman ~195,000 casos, con 60% en etapas localizadas o regionales.

2020

~190,000

~138

Disminución por saturación de servicios médicos y confinamiento durante el  impacto COVID-19; reducción en screening, afectando detección temprana.

2021

~200,000

~141

Recuperación post-pandemia; estimaciones INCan ajustadas por rezago en diagnósticos.

2022

~210,000

~143

Aumento sostenido; ~25,000 casos de cáncer de mama reportados en SSA.

2023

~220,000

~145

Pico estimado; 55% en mujeres, con mama (15-20%) y próstata (10-15%) como principales. Tasa más alta en CDMX y estados del norte.

Tendencias y análisis

  • Tendencia general: La tasa de incidencia aumentó de 130 en 2014 a 145 en 2023, un incremento del 11-12% ajustado por edad, con una caída temporal en 2020 debido a la pandemia. El promedio de incremento de casos es 1%, muy próximo al crecimiento poblacional. Las cifras absolutas subieron de 160,000 a 220,000, reflejando tanto el crecimiento poblacional como una mayor conciencia y acceso a servicios de salud en áreas urbanas. El GBD proyecta un aumento continuo si no se abordan factores prevenibles.
  • Por género: En 2023, las mujeres representaron 55% de los casos nuevos (principalmente mama: 25,000; cervicouterino: 13,000), mientras que en hombres predominan próstata (20,000) y pulmón. Las tasas son similares por género en adultos mayores (≥60 años: 300-400 por 100,000).
  • Por tipo de cáncer: Los más incidentes en 2023 fueron de mama (15%), próstata (12%), colorrectal (10%), pulmón (8%) y cervicouterino (6%). En niños (0-14 años), la leucemia representa 30% de los casos (5,000 anuales).
  • Por entidad federativa: Tasas más altas en el centro y norte (CDMX: 160, Nuevo León: 150), atribuible a mejores sistemas de diagnóstico; más bajas en el sur (Chiapas: 100, Guerrero: 110) por subregistro y acceso limitado. El RHNM reporta variaciones regionales en tipos como hígado en el norte.
  • Factores contribuyentes: Según la OMS y SSA, ~40% de los casos son prevenibles con estilos de vida saludables, screening (mamografías, colonoscopias) y vacunación. La pandemia causó un "rezago" de ~50,000 casos no detectados en 2020-2021, potencialmente elevando la mortalidad futura. Programas como el Programa Nacional contra el Cáncer buscan aumentar la detección temprana al 70%.

 

Relación con los seguros

Esta estabilidad estadística de la enfermedad de cáncer, anticipa que no habrá cambios significativos en las políticas de las Aseguradoras en el ramo de gastos médicos y vida, respecto de la suscripción. La única circunstancia relevante sigue siendo el alto costo de la medicina especializada, que sigue muy arriba de la inflación promedio del país, y se destaca en tratamientos tipo quimioterapias y radiaciones.

 

Conclusiones sobre las estadísticas mexicanas sobre cáncer

En conclusión, a nivel de mortalidad la tasa de crecimiento de muertes por cáncer en México es muy pequeña y con tendencia constante. La principal variable parece más relacionada al aumento de población cercano al 1% y el remanente de crecimiento 0.3% es fácil de atribuir a cualquier causa o combinación de factores, como el envejecimiento y el desabasto de medicamentos en el Sector Público. Esto anterior, es una visión estadística, lo cual no implica ningún diagnóstico ni pronóstico, sobre la etiología de alguna vacuna en particular, ni sustituye a las investigaciones de laboratorio. La conclusión es que no ocurrió ninguna crisis de mortalidad de cáncer asociable a un evento de vacunación masiva. Reitero, la estadística señala que no hay crecimiento notable del cáncer en México y, el comentario sobre cáncer en la escena pública está más ligado al escándalo mediático por situaciones de desabasto.

 

sábado, 16 de agosto de 2025

AYAHUASCA EFECTOS REALES Y LOS SEGUROS

 


Por Carlos Valdés Martín

Desde el punto de vista de Seguros, las sustancias psicotrópicas interesan como antecedente en los cuestionarios y como una exclusión directa en las coberturas de Gastos Médicos. El sentido típico de seguro, señala que la intoxicación implica una agravación esencial de riesgo (según la Ley LCS) y esto se refleja en las Condiciones Generales de los contratos.

Sin embargo, desde un punto de vista la ayahuasca es muy interesante por los efectos directos, que suelen ser menospreciados por el consumidor, ya que la promoción se disfraza de un “procedimiento tradicional”, como si fuese un auténtico ritual mágico. Incluso hay iglesias o sectas que incluyen la ingesta de este producto. Mientras la mayoría de los consumidores no manifiestan secuelas de preocupación, sí hay suficientes casos de alarma sobre este producto. En especial, el consumo sin ningún control real y la mezcla con otras sustancias ya ha provocado casos letales y daños de largo alcance. Aquí les comparto una investigación, con la ayuda de la Inteligencia Artificial:

 

La ayahuasca, una bebida psicoactiva utilizada tradicionalmente en ceremonias indígenas amazónicas, ha sido asociada con casos de daños severos y fallecimientos. Las reacciones adversas se reportan en dos tercios de los consumos, casos donde el cuerpo avisa que hay problemas como vómito y dolores; mientras las reacciones con daños severos y muerte son menores en relación con su uso global. Ese tipo de daño severo y letal de la ayahuasca ronda en el 2% de los consumos. Hay que aclarar que cualquier sustancia comercial o medicamento que reporte daños severos de 2% en su consumo, de inmediato estaría prohibido y sería sujeta a demandas millonarias. A continuación, se resumen los casos reportados de daños severos y muertes basados en información reciente y confiable:

Daños Severos

  1. Efectos Físicos Adversos:
    • Un estudio publicado en PLOS Global Public Health (2022) encontró que el 69.9% de los consumidores de ayahuasca reportaron efectos físicos adversos, como náuseas y vómitos (68.2%), dolor de cabeza (17.8%) y dolor abdominal (12.8%). Siendo que de las ingestas reportadas fue el 2.3% tan severo que requirió atención médica. Factores como edad avanzada, condiciones de salud preexistentes, consumo en contextos no supervisados y uso prolongado aumentan enormemente el riesgo.

 

    • Hay efectos cardiovasculares recurrentes y descontrolados, como aumento de la presión arterial y la frecuencia cardíaca, los cuales son en extremo peligrosos para personas con problemas cardíacos no diagnosticados.

 

    • Las interacciones con medicamentos, especialmente antidepresivos (IMAO), pueden causar síndrome serotoninérgico, potencialmente fatal, con síntomas como agitación, fiebre alta y convulsiones. Esto se ha notado por casos de hospitalización y fallecimientos asociados a la ayahuasca. Lo más preocupante es que no existe ningún estudio donde se analice la interacción de esta planta con la mayoría de las otras medicinas y condiciones de salud, que también implican potenciales muy peligrosos.

 

  1. Efectos Psicológicos:
    • Aproximadamente el 55% de los usuarios reportaron efectos psicológicos adversos, como alucinaciones (28.5%), sentimientos de desconexión (21%) o pensamientos perturbadores (19.2%). Debido a que la ingesta de esta planta se vende como una experiencia mágica y trascendente, la absoluta mayoría de los consumidores participan con un fuerte prejuicio en favor, por lo mismo el 87.6% de estos casos percibió los efectos como parte de un proceso de purificación. En personas vulnerables, por ejemplo, con predisposición a trastornos como esquizofrenia o bipolaridad, esta ingesta ha desencadenado psicosis que están comprobadas.

 

    • Un caso documentado en Revista Colombiana de Psiquiatría (2022) describe a un hombre de 26 años que desarrolló un episodio psicótico tras consumir ayahuasca, con síntomas como ideas delirantes, alucinaciones y agresividad, requiriendo hospitalización y tratamiento con antipsicóticos.

 

    • Un caso reciente en Paraguay (agosto 2024) reportó una crisis psicótica grave en una persona tras un ritual con ayahuasca, con síntomas que incluyeron desorientación y necesidad de sedación, además de un posible segundo caso bajo investigación.

 

  1. Otros Riesgos:
    • Una nota pública de Embajada de EE.UU. en Perú (2025) advirtió sobre agresiones sexuales, robos y delitos violentos en retiros no regulados, donde los participantes, bajo los efectos de la ayahuasca, son en extremo vulnerables.
    • No existen registros ni protocolos profesionales sobre los supuestos guías o chamanes, por lo que se carece de garantías sobre el profesionalismo de los promotores en el consumo de ayahuasca. En 2024 hubo 2 muertes reportadas en México por este tipo de ingestas, donde los reportajes muestran la irresponsabilidad y absoluta carencia de ética profesional en el manejo de estas sustancias[1].

 

    • La falta de regulación en centros que ofrecen ceremonias significa riesgo de consumir mezclas adulteradas o de mala preparación, lo que puede intensificar los efectos adversos.
    • Hay casos reportados de fallecimiento y daño severo donde el consumo de ayahuasca se mezcló con otras sustancias, tampoco reguladas.

 

Fallecimientos

  1. Estimaciones Globales:
    • Un informe de 2023 analizó 58 muertes asociadas con la ayahuasca reportadas por periódicos entre 2010 y 2022[2]. En las autopsias predominan los efectos secundarios como causa inmediata de muerte, pues la intoxicación aguda por ayahuasca (mezcla tradicional de Banisteriopsis caapi y Psychotria viridis) lo que más afecta son centros nerviosos superiores, que no son inmediatamente fatales.

 

    • Las muertes se atribuyeron al encadenamiento del consumo junto con los otros factores mórbidos, como:
      • Infartos: Dos casos recientes (Luis Acevedo y Fernando Henrique Queiroz Tavares) involucraron problemas cardíacos preexistentes, agravados fatalmente por la ayahuasca.

 

      • Envenenamiento por mezcla por otras sustancias: Cuatro muertes se relacionaron con infusiones de tabaco (sobredosis), y una con escopolamina (un potente narcótico que, ocasionalmente, es mezclada con ayahuasca para controlar sus efectos secundarios o para inducir efectos de reducción de voluntad[3]).

 

      • Sobrehidratación: Un caso (Brandon Begley) muerte asociada con hiponatremia debido a consumo excesivo de agua durante un ritual, anotando que entre la pérdida de referentes y el vómito usual de la ayahuasca, desatan una sed enfermiza.

 

      • Suicidios y homicidios: 14 casos fueron suicidios, pero solo uno ocurrió inmediatamente después de consumir ayahuasca, y ocho fueron homicidios, incluyendo dos perpetrados bajo sus efectos.

 

 

 

  1. Casos Específicos:
    • En 2024, un turista estadounidense murió en Perú durante el consumo de ayahuasca en un ritual. La causa de muerte fue un fallo multiorgánico, con derrame pleural y pancreatitis aguda, agravada por la interacción de la ayahuasca. El Dr. Narciso López explicó que “es un problema de tipo inflamatorio, que algunas veces el ayahuasca puede producir”[4].

 

    • La Embajada de EE.UU. en Perú reportó varias muertes de ciudadanos estadounidenses en 2024 relacionadas con retiros de ayahuasca, atribuidas a complicaciones de salud o delitos asociados, no directamente a la sustancia.

 

Contexto y Precauciones

  • Consumo Global: Una estimación superficial considera que más de 4 millones de personas han consumido ayahuasca en la última década. En Brasil y Perú hay sectas religiosas que la consumen, donde más se ha promocionado su consumo. La relación entre muertes y consumo de ayahuasca es baja, pero los riesgos aumentan en contextos no regulados o sin supervisión de chamanes experimentados.

 

  • Factores de Riesgo: Las personas con condiciones psiquiátricas (esquizofrenia, trastorno bipolar), problemas cardiovasculares o que toman medicamentos incompatibles (antidepresivos, ISRS) son más vulnerables ante los riesgos detectados.

 

  • Recomendaciones: Los expertos enfatizan la importancia de consumir ayahuasca en entornos controlados, con guías capacitadas, y evitar su uso en personas con contraindicaciones médicas o psicológicas.

 

 

Recomendaciones y Conclusión

Los riesgos del consumo siempre están presentes, pues la ayahuasca no es una sustancia inofensiva. Sus efectos físicos (como vómitos y aumento de la presión arterial) y psicológicos (como alucinaciones y psicosis) con facilidad desencadenan complicaciones graves, especialmente si se combina con otras sustancias, se consume en contextos inseguros o la recibe una persona con antecedentes de salud. Se recomienda a los asegurados que eviten esta práctica para no poner en riesgo la vigencia de su protección. En Gastos Médicos pueden caer en agravación esencial del riesgo por ese tipo de consumo, con lo que invalidan su protección contratada. 

Hay estudios alentadores sobre el encausamiento hacia separar la sustancia activa del ayahuasca para utilizarla de manera médica, en especial, como una alternativa en antidepresivos, que a la fecha está en protocolos experimentales.

  • Contar con una supervisión responsable es esencial: Los riesgos son significativamente mayores en retiros no regulados, donde la falta de control médico y la posible adulteración de la bebida agravan los peligros. Sin respaldo y supervisión médica, lo recomendable es evitar su consumo.
  • Precaución Médica adicional: Las personas con antecedentes psiquiátricos, problemas cardiovasculares o que toman medicamentos (como antidepresivos) deben evitar la ayahuasca, ya que puede exacerbar estas condiciones o interactuar peligrosamente.
  • Conciencia de Consecuencias: La ayahuasca puede inducir estados mentales que, en casos raros pero graves, contribuyen a comportamientos suicidas o violentos, especialmente en personas vulnerables o en entornos caóticos.

 

NOTAS:

[2] Evaluado por ICEERS, que es una organización enfocada a buscar los efectos favorables de las plantas tradicionales, por lo que resulta en un enfoque sesgado hacia disculpar los efectos y minimizar los daños.

[3] Como derivado de la planta burundanga, es un agente riesgoso, que se ha empleado para provocar efectos incapacitantes en las personas. Grupos delincuenciales utilizan este producto para cometer abusos y robos. https://www.ces.edu.co/noticias/como-evitar-ser-victima-de-la-escopolamina-en-la-universidad-ces-lo-explican/

[4] En https://www.infobae.com/peru/2025/06/03/turista-estadounidense-muere-en-sesion-de-ayahuasca-hallazgo-medico-revelo-causa-del-fallecimiento/