domingo, 23 de septiembre de 2018

FAKENEWS SOBRE CELULARES Y ACCIDENTES DE AUTO






Por Juan Lomas Jr.

Fakenews sobre celulares
Investigando la noticia de que la utilización de Celulares es la PRIMERA CAUSA de accidentes en México terminé por descubrir una evidencia escandalosa: “alguien” promueve una CAMPAÑA TIPO FAKE NEWS PARA CULPABILIZAR A LOS CONDUCTORES y cobrar multas injustas. El argumento principal está a la vista: si los celulares fueran culpables del 40% de los accidentes como se afirma entonces el periodo anterior a la utilización de celulares estaría en 40% abajo en siniestralidad de colisiones. Cualquier revisión de las estadísticas arroja que no existe tal incremento espectacular en los accidentes viales, sino que los provocados por alcohol han disminuido de manera notable… Resulta que mientras los conductores promedio se comportan mejor, la autoridad se comporta agresiva en los castigos y las campañas de victimización. Gran parte de los accidentes se deben a malos diseños urbanos y a un descuido inexcusable del mantenimiento por baches, alcantarillas abiertas, vados excesivos, acortamientos de los caminos sin aviso, cambios de sentido sin aviso previo, vialidades cerradas sin señalamiento, carriles confinados que no están bien demarcados y un larguísimo etcétera de mal diseño vial… Que todo eso corresponde a la AUTORIDAD, pero resulta más rentable culpar al ciudadano.
Un primer obstáculo para una investigación detallada de las causas de los accidentes sucede en la mala preparación técnica y algunos embudos legales que dificultan la operación. En segundo lugar, la estadística reúne en un mismo rubro un accidente mortífero con múltiples muertos y heridos junto con un alcance sin ninguna trascendencia. 
Donde está lo Fake en esto
Asumiendo lo anterior ¿dónde está lo Fake? En 2015 la Comisión Nacional de Seguridad sacó un boletín de prensa que recibió amplia difusión donde señalaba al Celular como la causa número 1 de accidentes, culpándolo del 40% de los percances.[1] ¿4 de cada 10? Y luego esta versión se repitió hasta el año presente en la presa nacional y en diferentes declaraciones de autoridades locales. El resultado es que los legisladores de varios Estados de la república fueron introduciendo multas por la utilización del celular “mientras se maneja”. Las multas han ido creciendo, como se señala recientemente en la CDMX. ¿Dónde está lo Fake? Resulta que la CNS no hizo ninguna investigación ni posee ninguna estadística propia sobre accidentes automovilísticos. Y como la “intención” es aumentar las multas, cada vez que la autoridad local aumenta las multas, procura inventar su propia cifra, así en Orizaba una autoridad le adjudicó al uso de celulares más audífonos el 75% de los accidentes, pero tampoco presentó ninguna estadística real para confirmar su dicho.[2]  A su vez, esto lo rastreamos hacia noticias anteriores, que tenían la misma estructura, por ejemplo en 2012 en el periódico La Nación el artículo se refiere a lo mismo, pero ya no se trata de una estadística (objetiva de peligrosidad) sino de un estudio de efecto en la pericia, lo cual podría estar más próximo a las competencias de la fuente que veremos en seguida.[3] Lo que se afirma es que un mal uso del celular (puesto en la mano, por inexpertos o haciendo texting) provoca fallas en una prueba de manejo en un porcentaje alto y se compara con efectos de cannabis y alcohol. 
El Instituto “fantasma”
A falta de número reales, el impacto del artículo se sustituye con algunas siglas internacionales y eso le proporciona un aire de autoridad a lo que se plantee. Así, al rascarle la cola a esta Fake news resulta que la cifra se la atribuyen a la The Institute of Advanced Motorist.[4] Quien no investiga se pasma cuando lo dice un tal The Institute… ¡Uy qué temor! Resulta que esta organización está clasificada desde 1956 como una noble caridad que busca mejorar las condiciones de los conductores y su seguridad; su derivación actual más notable se llama “IAM RoadSmart”, una organización que promueve cursos de manejo y otras ventajas a sus socios. Aclaramos que es una organización privada británica que no controla la estadística de siniestralidad vial de ningún país. 
Pruebas de manejo controladas y descontroladas
Que en una prueba de manejo controlado se obligue a un primerizo a realizar un texting mientras maneja en curva y acosado por un instructor, no es lo mismo a que se tenga una real estadística del uso del celular en condición normal de “manos libres”. Existe una prueba muy divertida filmada en Bruselas donde a los novicios en prueba de manejo se les obligó a hacer texting.[5] Lo que sí hay comprobado son ese tipo de pruebas entre cómicas y satíricas donde se obliga a conductores a realizar texting mientras se toman curvas y un asistente los distrae, siendo el resultado previsible. 
Un verdadero estudio de riesgo por una verdadera organización
A diferencia de las Fake News culpabilizando al celular más allá de lo razonable, nos encontramos con verdaderos estudios, donde el celular ni siquiera destaca. Veamos esta nota:
“Según un informe del Centro de Experimentación de Seguridad Vial (CESVI) la causa principal de la siniestralidad vial es el error humano. El 89,5 % de los accidentes se produce por alguna actitud negligente, una distracción o la propia impericia. Las estadísticas señalan que la falla más común es la invasión de carril ocupa el 44,2 %, seguida por la distracción (14 %) y la maniobra abrupta (10 %). Pero también se registraron, velocidades indebidas (9 %), no respetar la señalización (6,9 %), no respetar la prioridad de paso (6,5 %), distancia de seguimiento inadecuada (5,2 %) y cansancio (2,7 %), entre otros.”[6] Debemos aclarar que CESVI es una organización privada, con amplio reconocimiento, pues da un servicio estandarizado a las aseguradoras y público en general, para logara un control de calidad en la seguridad vial y reparación automotriz. Existen organismos CESVI que en muchos países y comparten imagen, prestigio e información.
De hecho, si damos una mirada al concepto “invasión de carril” y su impacto principal sobre los accidentes viales nos preguntamos por qué no ha sido considerado de manera importante en la legislación mexicana. 
Los factores múltiples de riesgo en distracción
Como sensatamente señalan otras fuentes, hay muchos factores de riesgo por distracción. “Distracciones: usar el celular, maquillarse, comer, manipular la radio, actualizar o ingresar una ruta en GPS, son las acciones más comunes que más accidentes provocan. Mientras conduzcas tu vehículo debes estar concentrado en tu entorno para poder prever situaciones de riesgo. Manejar con alguna distracción es garantía de un accidente tarde o temprano.”[7] Como miembros del sector asegurador somos partidarios de minimizar cualquier riesgo de manejo, sin embargo, esto dista mucho del protagonismo que se ha pretendido colocar a los celulares. 
Conclusión
Resulta urgente que el público usuario y, en especial, los conductores pongan “el grito en el cielo” para exigir a la autoridad que deje de culpabilizarlos innecesariamente y que promueva estudios profesionales liderados por instituciones especializadas. En particular, resulta inútil la oleada de elevación de multas, con el consecuente incentivo perverso para la distracción de la policía y de los recursos públicos, cuando son indispensables para combatir la criminalidad. Por más que el INEGI es el organismo oficial de la producción estadística en el país, tampoco se requeriría de gastar nuestros impuestos si entidades de prestigio como CESVI contribuyen con información confiable.Y si maneja, evite manipular cualquier objeto, no tome celulares, no textee, no se maquille, no haga nada que lo distraiga de su objetivo de terminar el viaje con seguridad.


[3] La fuente es IAM Noticia Al volante: El uso del celular es más peligroso que el alcohol - Copyright © LA NACION - URL: "https://www.lanacion.com.ar/1454259-al-volante-el-uso-del-celular-es-mas-peligroso-que-el-alcohol .
[4] Citado en el portal del periódico El universal. http://www.eluniversal.com.mx/articulo/autopistas/2015/08/20/principales-causas-de-accidentes-viales
[5] En youtube titulado “The impossible texting & driving test”.
[6] Apareció en el portal del periódico El clarín,  https://www.clarin.com/autos/causas-accidente-comunes-volante_0_Hk2LHYWmz.html

domingo, 9 de septiembre de 2018

¿CRUDA Y ALCOHOL SON EXCLUSIÓN PARA SEGUROS?




Por Carlos Valdés Martín

La prohibición por exceso de alcohol nos ha acostumbrado a pensar que las Aseguradoras van a excluir la cobertura por ebriedad o borrachera extrema, pero ¿qué la cruda o resaca posterior a la borrachera resulta también un riesgo? Tantas campañas publicitarias en contra del texting y utilización de celulares, pero ¿qué con la cruda? En fin, supongo que sabemos hay accidentes automovilísticos que surgen de cansancio excesivo y por cruda alcohólica.
El efecto negativo del alcohol después de una borrachera severa suele minimizarse, como si el dolor de cabeza, sed o aturdimiento definieran todo el daño. Según información de estudios en laboratorio o de profesionales médicos las consecuencias de la resaca son más importantes de lo admitido usualmente.
¿Una resaca influye en tus pensamientos y comportamientos? Una investigación demuestra que las resacas afectan sobre los procesos cognitivos esenciales para la vida cotidiana. Hay evidencia de deficiencias en la memoria (a corto y largo plazo), la capacidad de mantener la atención y psicomotricidad (relacionada con el manejo).[1] El deterioro de la atención tras el consumo de alcohol proviene de la fatiga, pero no exclusivamente. La fatiga afecta la capacidad para mantenerse enfocado y reduce los "recursos mentales", haciendo que desempeñar tareas sea deficiente. La atención integra una habilidad clave durante el manejo. Aunque hay pocos estudios directos sobre este efecto y, en algunos desempeños, no se notó el deterioro, por ejemplo la velocidad a la que condujeron las personas con resaca no marcó diferencia. Pero dos estudios descubrieron fallas en la capacidad de un individuo para manejar durante la resaca, y uno de los estudios comparó el nivel de deterioro cuando las personas con resaca frente a las personas bajo la influencia del alcohol. El notorio descubrimiento es que las deficiencias relacionadas con la conducción relacionada con la resaca son el equivalente a tener una concentración de alcohol en la sangre de 0,05 a 0,08 por ciento (BAC: Blod Alcohol Content, en español Nivel de Alcohol en la Sangre), lo cual empata con los límites de manejo de bebidas para la mayoría de los países europeos, donde se promedia 0.05 por ciento BAC y en el Reino Unido es 0.08 por ciento. La conclusión es que las deficiencias en la conducción por resaca equiparan con el nivel inaceptable por ley para la intoxicación alcohólica. 

Exclusión específica para manejadores
A la fecha, únicamente para los vehículos comerciales o “pesados” está generalizada la exclusión de cobertura por alcoholismo. La peligrosidad inherente de los vehículos con mayores dimensiones y peso, o con la responsabilidad de transportar a grandes cantidades de pasajeros, ha sido percibida en la suscripción de seguros. Por ejemplo una exclusión típica señala que la ebriedad o ingesta de drogas cuando influya directamente en el daño es motivo de exclusión.[2]

¿Y la libertad del conductor alcoholizado?
Otro ejemplo donde se delimita una situación que surge de la ingesta de alcohol por parte del conductor es la defensa legal. Recordemos que comprar un seguro no es una invitación a la irresponsabilidad, por lo que existe una interesante estipulación donde “La defensa legal no garantiza: 1. La libertad del conductor ante el Ministerio Público, si conduce bajo los efectos del alcohol o estupefacientes, o si abandona a los lesionados.”[3] Este problema ha resultado en casos de colisiones muy graves, cuando un conductor ebrio conduce a exceso de velocidad, provocando múltiples desgracias.

Agravación de riesgo
El concepto legal de fondo que manejan este tipo de exclusiones se refieren a la “agravación de riesgo”, que es un término importante para los seguros. La “agravación de riesgo” la define la Ley del Contrato de Seguros que procurando interpretarla en términos accesibles señala que el Asegurado o sus colaboradores son capaces de incrementar el riesgo amparado de tal manera que rompan el marco planteado en el Contrato de Seguros. El tema es tan importante y fuente de tantas interpretaciones que merece una entrada al detalle.

Conclusión
La cruda implica un riesgo al manejar por las condiciones de cansancio y deterioro de las funciones intelectuales, sin embargo, en México la autoridad no ha tomado cartas en el asunto. Por su parte, los excesos en la ingesta de alcohol sí provocan pérdida de beneficios en los contratos de seguros, en especial, resulta inadmisible que los conductores de vehículos comerciales manejen embriagados. Así, ya lo saben… si toman no manejen.

NOTAS:


[1] Craig Gunn, PhD Candidate, Universidad de Bath y Sally Adams, profesora de Psicología de la Salud, Universidad de Bath, revista Conversation.
[2] Condiciones Generales Quálitas Cía. de Seguros para Pick Ups y Camiones de carga, registradas en junio de 2014.
[3] Condiciones Generales AXA Seguros para Vehículos Residentes, registradas en febrero de 2013.